La tecnología RFID en festivales está revolucionando (para bien) el panorama
La tecnología NFC / RFID está revolucionando la forma de organizar y disfrutar de festivales, conciertos y eventos en vivo. Esta tecnología que se integra en pulseras o tarjetas se utiliza fundamentalmente para potenciar los pagos cashless, controlar accesos y aforos, acciones de gamificación, amplificación de marca...
Los eventos que cuentan con esta tecnología (que cada vez son más) obtienen grandes ventajas como es una mayor optimización de los recursos, información en tiempo real de lo que ocurre en el evento, aumento de la facturación y la mejora de la experiencia de los asistentes.
Sin embargo, y aunque parezca increíble, todavía hay promotores reacios a contar con esta tecnología en sus festivales: bien por desconocimiento, bien porque han tenido una mala experiencia... Por eso, en este post derribamos 5 mitos sobre la tecnología RFID en festivales.
La tecnología RFID no ofrece seguridad en festivales 
Nada más lejos de la realidad. La tecnología NFC / RFID ofrece una seguridad absoluta tanto en el tratamiento de los datos como en el encriptado de la información en todos los sistemas que la emplean: cashless payment, control de accesos, control de aforo...
La tecnología NFC de IDASFEST cuenta, además, con sistemas anti-hurto lo que permite inhabilitar la pulsera en el momento en el que ha sido extraviada, evitando así que pueda ser utilizada por otra persona. En esos casos, la persona que la ha perdido recibirá otra pulsera con la misma información con la que la perdió. Por otro lado, la tecnología NFC elimina también cualquier posibilidad de fraude a la hora de acceder al evento, ya que se trata de un sistema de identificación único.
La seguridad de la tecnología NFC / RFID de IDASFEST basa su desarrollo en una estructura de sistema robusto que gestiona la actividad de los usuarios, los datos y la seguridad del propio servidor.
Por último, en cuanto al tema de la privacidad, esta tecnología genera información en tiempo real y confecciona públicos específicos en función de los asistentes, pero en ningún momento utiliza datos de carácter personal.
La RFID es dificil de utilizar en festivales 
La tecnología de las pulseras NFC es súper sencilla de utilizar. Casi un millón de personas utilizaron nuestra tecnología sin problema durante 2019 en más de 150 festivales.
En este sentido, la comunicación es clave: enseñar al asistente cómo se utiliza la tecnología RFID y las ventajas que le aporta. También, es necesario comunicar cuantas políticas específicas existan relacionadas con las pulseras NFC, como por ejemplo en cuanto al proceso de devoluciones.
En la práctica es muy sencillo: con un movimiento de muñeca se abre un sinfín de posibilidades. Los asistentes tendrán más tiempo para disfrutar del evento y no para preocuparse por hacer largas colas.
La tecnología RFID depende de la conectividad wifi del evento 
La tecnología RFID de IDASFEST no depende necesariamente de conexión a internet, sino que puede basarse en sistemas conectados a un servidor en local. Si bien es cierto que, depende de las condiciones del evento, puede configurarse un tipo de conexión u otro, toda la tecnología de IDASFEST está habilitada para poder trabajar también de forma offline.
Así, si por lo que fuera la conexión local cayera, los terminales podrían continuar cobrando y permitiendo los accesos al recinto, garantizando el 100% del funcionamiento del sistema independientemente de la situación.
La tecnología RFID es cara de implementar en un festival 
Otro de los grandes mitos en torno a la tecnología RFID y NFC es que es muy costosa. Esta afirmación se basa, generalmente, en un desconocimiento total de los beneficios que aporta la tecnología al festival o evento.
Tanto es así que, siempre, los beneficios derivados del uso de la tecnología RFID en festivales superan ampliamente el coste de implementar la tecnología y de diferentes formas: ahorro de costes, optimización de recursos o aumento de la facturación. De hecho, según estimaciones de promotores por norma general, el uso del cashless payment incrementa el consumo en festivales en torno a un 20% respecto a métodos de pago tradicionales.
También hay que destacar la importancia de las posibilidades que la tecnología ofrece a la hora de optimizar los recursos. Por ejemplo, los ingresos se canalizan en una única plataforma, evitando cualquier tipo de fraude y evitando que luego el dinero (o los tokens) tengan que ser contado y recogido uno a uno. También lo que ofrece en cuanto a aumentar la facturación en momentos donde el consumo es inferior: si por ejemplo vemos que una barra no tiene casi facturación, podemos implementar algún tipo de promoción para desviar público hacia esa zona.
Además, el uso de la tecnología NFC aumenta los emplazamientos y las posibilidades de patrocinio permitiendo que los patrocinadores puedan, también, acceder a información e informes que le permitan calcular su ROI.
La tecnología RFID en eventos es una moda pasajera y no mejora la experiencia de los usuarios 
La tecnología RFID en festivales y eventos es una realidad, además, tras la crisis sanitaria de la COVID-19 todas las acciones sin contacto (como son todas las que permite la tecnología NFC) se verán potenciadas.
Toda la información que se genera gracias al uso de la tecnología RFID permite que se pueda mejorar el evento durante el transcurso del mismo e incluso mejorar las siguientes ediciones del mismo. Por ejemplo, conocer cuántos asistentes han accedido a una hora en concreto permitirá a los organizadores conocer las horas a las que reforzar al personal de acceso para que la entrada al festival se realice con mayor celeridad.
Por otro lado, todo lo que permita agilizar colas (con la tecnología de accesos o cashless payment) hará que la estancia de los asistentes sea mucho más agradable y que su experiencia sea mejor.
Además, la tecnología NFC permite a los asistentes poder disfrutar del evento sin preocuparse de nada más: ni de pagar en barra, ni de hacer colas, ni esperas... ¡Solo preocuparse de disfrutar!
La tecnología NFC eleva el evento a otro nivel.
